
La ciberseguridad, en la era digital en la que vivimos, se ha convertido en una preocupación prioritaria debido al aumento del uso de tecnologías y dispositivos conectados a internet, lo que aumenta el riesgo de ser víctimas de ataques cibernéticos.
En este contexto, la protección de nuestra información, bien sea personal o empresarial, es fundamental a la hora de salvaguardar la seguridad y la privacidad.
Por esto es importante conocer los conceptos básicos y las prácticas de seguridad informática, además de las formas en las que estas pueden ayudarnos a proteger la información. Profesionales especializados en ciberseguridad, que cuenten con las habilidades y la formación necesarias, son fundamentales para identificar y prevenir riesgos, además de proteger los sistemas y datos de posibles amenazas.
La Maestría en Ciberseguridad de la Universidad Europea en Perú es una de las mejores opciones para especializarse en esta área, lo que abrirá las puertas a construir un perfil profesional altamente demandado. Pero primero veamos cuáles son las funciones principales de los especialistas de este campo.
A su vez, y teniendo en cuenta que el tratamiento de los datos es una de las principales tareas de la contemporaneidad, también está la Maestría en Protección de Datos Personales que se complementa muy bien con la Maestría en Terrorismo, con miras a reforzar la seguridad desde distintos frentes que van en el mismo sentido.
Es crucial la implementación de medidas de seguridad de la información debido a la cantidad creciente de amenazas cibernéticas, entre las que se cuentan el malware, phishing, ataques de denegación de servicio y robos de datos.
Estas amenazas pueden causar daños financieros, pérdida de propiedad intelectual y también la violación de la privacidad de las personas. Ante esto, ¿qué es lo que hace exactamente la seguridad informática?
A la seguridad de la información se le conoce como un conjunto de prácticas y medidas que se implementan con el objetivo de proteger los sistemas y los datos de amenazas externas o internas. Esto incluye una acción como la del resguardo de información personal, financiera, de propiedad intelectual y demás datos que son almacenados en formato digital.
Además, comprende una amplia gama de estrategias, políticas, herramientas y técnicas y encuentra su base en tres principios fundamentales:
Luego de saber qué es la seguridad de la información y su importancia, queda por aclarar cómo funciona. Una de las formas principales en que la ciberseguridad ayuda a proteger los datos es mediante el control de acceso, lo que garantiza que únicamente las personas autorizadas pueden acceder a la información.
Para ello, se utilizan diferentes mecanismos de autenticación, como contraseñas, huellas digitales y tokens, entre otros.
Otro de los mecanismos de protección de datos que ofrece la seguridad informática es la encriptación, utilizada para proteger datos en tránsito y en reposo. A través de ella, la información se transforma en un código que puede ser descifrado únicamente mediante una clave.
Además de estos dos pilares básicos, existen otras técnicas y herramientas de protección de datos comunes que son:
Además de estas medidas, la ciberseguridad implica también la educación y concientización de las personas que manejan información digital. El conocer los riesgos les permite estar alerta, pero también los prepara para tomar medidas preventivas de protección.
La inteligencia artificial (IA) es una de las tendencias más importantes en la seguridad informática actual. Por su capacidad para analizar grandes cantidades de datos en tiempo real e identificar patrones de comportamiento que podrían ser indicativos de una amenaza, se está utilizando cada vez más para detectar y prevenir amenazas cibernéticas.
Otra tendencia muy importante es el desarrollo de la nube y los servicios en línea. Son muchas las empresas que están trasladando sus datos y sistemas a la nube, lo que ofrece muchas ventajas, como una mayor flexibilidad y escalabilidad.
Sin embargo, esto también implica que los datos estén más expuestos a amenazas cibernéticas, por lo que se requieren medidas de seguridad adicionales para protegerlos.
Sumado a esto, el Internet de las cosas (IoT) también plantea desafíos de seguridad porque, generalmente, a medida que más dispositivos se conectan a Internet, crece también el riesgo de ataques cibernéticos.
Es una realidad que el futuro de la ciberseguridad es incierto, pero también es innegable que está en constante evolución. Esto lo que hace es proyectar una alta demanda de especialistas del área, lo que a su vez redunda en que se generan un sinnúmero de oportunidades de desarrollo profesional.
En este contexto, es muy importante para las empresas y expertos de la seguridad mantenerse actualizados, a través, entre otros, de la formación académica, además de adaptarse a medida que surjan nuevas amenazas y tecnologías.