
Si te dedicas a ámbitos como la educación o los negocios, seguramente has oído más de una vez la sigla TIC. Esta hace referencia a las tecnologías de la información y la comunicación, un conjunto de herramientas, programas y dispositivos que permiten procesar, almacenar y transmitir datos.
Comprender qué son las TIC es clave, porque su impacto atraviesa prácticamente todos los ámbitos de la vida, desde cómo aprendemos hasta cómo trabajamos. No en vano, estudiar un posgrado como la Maestría en Tecnologías de la Información o la Maestría en Ciberseguridad de la Universidad Europea en Perú es una opción altamente valorada por las empresas.
Las TIC facilitan que la información circule de forma rápida y eficiente, conectando a personas y organizaciones en todo el mundo. Abarcan tanto un celular inteligente como sistemas complejos de inteligencia artificial.
En general, estas tecnologías tienen una serie de rasgos comunes que resaltan su importancia:
Por todo esto, se han convertido en la base de la sociedad digital y del desarrollo económico, social y educativo de los países. En Perú, por ejemplo, el crecimiento de las startups fintech no habría sido posible sin estas tecnologías, que permiten realizar pagos en línea, validar identidades digitales y brindar seguridad a los usuarios.
Para entender la utilidad y la importancia de las TIC, es importante observar cómo han transformado distintos sectores. Veamos algunos ejemplos de tecnologías de la información aplicadas en la vida real:
En el campo de la enseñanza, las TIC han abierto la puerta a nuevas formas de aprendizaje. La tecnología en la educación no solo facilita el acceso a los contenidos digitales, sino que promueve metodologías más interactivas y personalizadas. Hoy en día, miles de estudiantes peruanos pueden acceder a clases virtuales desde cualquier región del país, algo que hace apenas dos décadas parecía impensable.
Ejemplos prácticos: plataformas de e-learning como Moodle o Blackboard; herramientas de videoconferencia como Zoom y Google Meet, o sistemas de gestión de bibliotecas digitales.
En el ámbito empresarial, las TIC optimizan la gestión de datos, el comercio electrónico y la atención al cliente. Por ejemplo, las empresas peruanas que exportan café, textiles o software dependen de las plataformas digitales para internacionalizarse y llegar a nuevos mercados.
Ejemplos prácticos: programas de planificación de recursos (ERP) o comercio electrónico (Shopify, Mercado Libre), y sistemas de análisis de datos con big data.
En la salud, la telemedicina y los historiales clínicos electrónicos han permitido mejorar la atención a los ciudadanos de zonas alejadas. Durante la pandemia, por ejemplo, las TIC fueron clave para que hospitales y centros de salud mantuvieran una comunicación fluida con sus pacientes.
Ejemplos prácticos: aplicaciones de teleconsulta, dispositivos portátiles que monitorizan constantes vitales, sistemas de inteligencia artificial para diagnósticos médicos, etc.
Por último, no se puede dejar de mencionar la importancia de las TIC en la ciberseguridad, especialmente a nivel público. La protección de datos es un reto crucial en la era digital, puesto que los gobiernos prestan cada vez más servicios online y los ciudadanos nos hemos acostumbrado a realizar gestiones importantes por internet.
Ejemplos prácticos: portales de servicios digitales que permiten pagar impuestos, tramitar documentos o realizar denuncias en línea de forma segura.
En Perú, los ejemplos que hemos mencionado son tangibles. Las universidades emplean aulas virtuales, las empresas apuestan por el comercio digital y el Estado impulsa la transformación digital para facilitar trámites. Por estos motivos, las TIC ya forman parte de la vida cotidiana.
Entender qué son las TIC y su impacto en la sociedad es fundamental para cualquier persona que quiera desarrollarse profesionalmente en un mundo digital. Además de facilitar la comunicación y el acceso a la información, estas son un motor de innovación en múltiples sectores clave.
En definitiva, las TIC son más que solo herramientas: son el eje sobre el que gira el futuro profesional y personal de toda una generación. En consecuencia, prepararte para dominar este campo puede marcar la diferencia en tu camino laboral.